El gobierno federal ha proyectado la participación de la iniciativa privada para echar a andar en los próximos 12 años al menos 11 unidades hidroeléctricas con una capacidad bruta conjunta de 3 mil 514 megavatios, las cuales se sumarán a las 25 que actualmente existen en el país.
Según datos de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), entregados al Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (Ifai), en enero y abril de 2012 se echarán a andar dos unidades de la hidroeléctrica La Yesca y posteriormente las del Río Moctezuma (2014), Tenosique (2018), Copainalá (2019), Paso de la Reina (2020), las tres unidades de La Parota (U1, U2 y U3) proyectadas dentro del Plan Puebla Panamá, y Las Cruces y Acala, en 2023.
Al respecto, la CFE indicó que es de especial importancia la participación de la iniciativa privada en la generación de energía eléctrica, principalmente bajo las modalidades de autoabastecimiento y cogeneración.
La instalación de las nuevas centrales se llevará a cabo con base en esos esquemas, lo cual influirá de manera importante en el desarrollo del sistema de energía nacional, pues se modificarán los requerimientos de reserva y será necesario adaptar la red eléctrica para proporcionar los servicios de transmisión y respaldo requeridos.
A la fecha, informó la CFE, operan en el país unas 25 hidroeléctricas con un costo de producción y operación que va de 28 mil 731 dólares (a precio de 2010) por megavatio a 8 mil dólares por esa unidad de potencia.
Detalló que el costo de operación y mantenimiento que en 2010 significaron esas 25 hidroeléctricas fue el siguiente: tres unidades de Aguamilpa, 7 mil 776 dólares por megavatio, equivalente a una inversión de 3.55 dólares megavatio-hora; dos unidades de Aguaprieta, 13 mil 105 dólares por megavatio (7.22 dól/mvh); dos de La Amistad, 28 mil 731. 68 dólares (11.56 dól/mvh); dos de Bacurato, 23 mil 188.94 dólares (8.07 dól/mvh); tres unidades de la presa El Caracol, 9 mil 919 dólares (3.97 dól/mvh).
Asimismo, dos unidades de El Comedero, con una inversión de 22 mil dólares por megavatio en 2010 (8.12 dól/mvh); cinco del Chicoasén que recibieron recursos por 8 mil 35 dólares (2.19 dól/mvh); cuatro de Peñitas, 14 mil 133 dólares (3.15 dól/mvh), y dos de Zimapán, en las que invirtieron 11 mil 754.72 dólares (2.59 dól/mvh).
En los documentos, la CFE indicó que las centrales hidroeléctricas concentran su generación en las horas pico del sistema eléctrico, por lo que desplazan energía de las centrales térmicas con los mayores costos de producción. Dichas hidroeléctricas tienen una vida útil estimada de 50 años.
La entrega de los datos se hizo en respuesta a una solicitud en la que se pedían estimados financieros de las plantas hidroeléctricas en el país, así como el valor presente neto (VPN) y la tasa interna de retorno (TIR) para cada una de las plantas, e información de las hidroeléctricas en construcción.
Debido a que no entregó el VPN ni la TIR, el pleno del IFAI ordenó a la CFE realizar una búsqueda exhaustiva en la subdirección de programación, en la dirección de proyectos de inversión y la coordinación de proyectos hidroeléctricos, entre otras áreas, y entregue los datos a menos que no existan, tendrá que hacer la declaratoria formal, precisando con toda puntualidad el por qué de la inexistencia.
Fuente Diario La Jornada