Entre el 15 y el 18 de noviembre se reunieron en la ciudad de Lima, Perú, mujeres procedentes de comunidades latinoamericanas afectadas por la explotación de minas. Asistieron al evento representantes de Perú, Ecuador, Chile, Bolivia, Venezuela, Colombia, Guatemala y Costa Rica.
Las participantes coincidieron en que la llegada de las empresas mineras genera y aumenta la marginación, el empobrecimiento, el abuso, el desplazamiento, la violación de los derechos territoriales, el deterioro ambiental, la destrucción de los medios tradicionales de subsistencia, la discriminación y la desigualdad de las mujeres latinoamericanas.
De igual manera denunciaron el hostigamiento, las amenazas, la persecución, la intimidación, las demandas legales y los abusos sexuales contra las mujeres en resistencia a la minería. Por ello demandan el cese de estas prácticas y que las empresas mineras respeten los derechos humanos de los habitantes.
Declaración completa del evento