Con cohetillos celebraron anoche los pobladores de asentamientos la aprobación en el pleno del Congreso del decreto 9-2012, Ley de la Vivienda. La nueva normativa contempla atender las demandas de la población que vive en asentamientos y obligará al Estado elaborar un ordenamiento territorial y establecer bases institucionales.
En la sesión, que duró más de 3 horas, se presentaron varias enmiendas que fueron sancionadas por más de 90 congresistas, a excepción de los representantes del bloque Independiente y de la Gran Alianza Nacional (Gana) que en su mayoría se ausentaron.
El presidente de la comisión de Economía, Emmanuel Seidner, quien dirigió la votación del bloque oficialista explicó que se trasladarán Q257 millones al Fondo para la Vivienda (Fopavi), entidad encargada que dará funcionamiento a la Ley. También recibirán Q80 millones del impuesto que se recaude del cemento.
La nueva legislación también contempla que a quienes demuestren que han vivido en un asentamiento antes de diciembre de 2007 se les facilitará la legalización a un precio económico. Quedó establecido que el Fondo iniciará sus operaciones en un plazo de seis meses luego de que entre en vigor la ley.
Bueno y malo
Roly Escobar, líder de asentamientos, dijo que le comunicarán a las bases los consensos y aplaudió la promesa, meses atrás, de los diferentes bloques y del presidente Otto Pérez. Carlos Mejía, diputado de la bancada de la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca, también reconoció el esfuerzo.
Mejía argumentó que la Ley no cuenta con los "suficientes dientes para morder bien", porque, reiteró, se incumplió un acuerdo de otorgarle al fondo una asignación de Q700 millones. "De 100 puntos se consiguieron 80" finalizó.
Fuente: El Periódico