Para la urbanista brasileña Raquel Rolnik, profesora de la Universidad de São Paulo y consultora especial para el derecho a una vivienda adecuada del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (ONU), la Copa del Mundo que se disputará en su país no dejará un legado significativo a nivel ciudadano y afectará a los sectores más humildes de la sociedad.

"El legado que va a dejar la Copa no va a ser significativo. Hicieron algunos proyectos relacionados al transporte y a nuevas vías de comunicación entre estadios y aeropuertos, pero esas no son prioridades. Acciones esperadas referentes a la polución y al saneamiento ambiental están pendientes. También grandes asentamientos fueron desalojados sin brindarle a la gente una alternativa adecuada de vivienda. Para esas personas, en vez de un legado, la Copa trajo pérdidas", comentó Rolnik.

Más allá del tema urbanístico, la licenciada también dio su opinión sobre las protestas "Anticopa", que produjeron varios incidentes las últimas semanas en São Paulo.

"Me parece que la sociedad brasileña ha demostrado su descontento en relación al modelo de crecimiento económico y de inclusión social. Las manifestaciones tienen un contenido bastante claro de reivindación de derechos, especialmente como ciudadanos, en el que se pide una mayor cantidad de espacios públicos y servicios públicos de calidad", agregó.

Finalmente, Rolnik se mostró crítica con la actual suba de precios relacionada a los grandes eventos que organizará Brasil, como el Mundial y los Juegos Olímpicos en 2016. "Hay una gran especulación inmobiliaria, que termina afectando a la gente más humilde y a su calidad de vida. Hay gran cantidad de personas que vive en la calle y sin techo. No hay un censo, pero observamos que cada vez hay más gente sin condiciones de vivir en una casa. Esos números son alarmantes", finalizó.

Fuente: Terra