En 30 años, la demanda de agua superará en un 40% a la oferta disponible. El problema, serio en los países desarrollados, será crítico en los menos avanzados. Sin embargo, la gestión de la escasez puede ser una oportunidad para el avance de una economía verde que, a su vez, sirva de soporte a un desarrollo sostenible. Así expuesta, la teoría parece sencilla, pero su puesta en práctica no lo es tanto. Eso es lo que están exponiendo en una cumbre de las Naciones Unidas (ONU) sobre el agua que se está desarrollando en Zaragoza.
En la capital del Ebro, 100 expertos internacionales y responsables políticos participan en la conferencia internacional "El agua en la economía verde en práctica: hacia Rio+20". El evento, que se puede seguir on-line , pone al agua en el centro de todos los problemas pero también en el de todas las soluciones.
El modelo de desarrollo seguido por los países más avanzados no tenía en cuenta en la ecuación una gestión sostenible del agua. Los menos desarrollados, con el mismo derecho al desarrollo que los primeros, podrían verse tentados, y más en un contexto de crisis económica como el actual, a seguir su mal ejemplo.
Por eso, en la conferencia se expondrán decenas de casos de un uso eficiente de los recursos hídricos. Es el caso de algunos proyectos llevados a cabo en América Latina, Corea (donde hay un plan para la recuperación integral de sus cuatro principales ríos) o Australia (donde las leyes para gestionar los ríos Murray y Darling se han convertido en un referente mundial).
"En los países más pobres el acceso a los servicios de agua y saneamiento no es sólo una condición necesaria para la superación de la pobreza mediante la cobertura de una necesidad básica, sino que también es una condición necesaria para el progreso económico", escribía la directora de la Oficina de Naciones Unidas de la Década del Agua; Agua para la Vida 2005-2015, Josefina Maestu, de cara a la conferencia.
Pero su desarrollo no debe de seguir el modelo de los ya desarrollados. El suyo debe incluir, desde el principio, el coste del agua y su gestión eficiente. "Los países en desarrollo pueden beneficiarse del paradigma de la nueva economía verde negándose a seguir el camino del desarrolla ahora y limpia después", decía en una entrevista la presidenta del Foro del Agua de Corea.
Como escribía Maestu, los tres pilares de esta economía verde son: un cambio en los patrones de producción y consumo de los países más avanzados; una transición al desarrollo de los menos avanzados que sea sostenible; y, por último, los primeros deben transferir tecnología y recursos financieros suficientes a los segundos. Este círculo virtuoso es el que puede hacer de la economía verde un motor para el desarrollo de unos y para la salida de la crisis de los otros.
De hecho, la conferencia de Zaragoza quiere dejar listas una serie de herramientas, unas 60 o 70 mejores prácticas en su uso para la promoción del agua y la economía verde y varios casos de éxito para que sean tenidos en cuenta en la conferencia medio ambiental de Naciones Unidas "Río+20" que tendrá lugar en Rio de Janeiro, Brasil, en junio del 2012, celebrando el 20 aniversario de la primer conferencia sobre el medio ambiente que tuvo lugar en la misma ciudad en 1992.
http://www.publico.es/ciencias/399845/la-onu-desarrolla-una-conferencia-global-sobre-el-agua-en-zaragoza-planetatierra