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Brasilia, 16 de febrero de 2005.
En este momento, cuando nuestros corazones aún están dirigidos hacia los gravísimos acontecimientos de Anapu en el estado de Pará, donde el latifundio asesinó a Doroty Stang y a otros trabajadores rurales de aquel estado, nos encontramos con otra tragedia, ahora en la ciudad de Goiania, Goiás.
Una violenta recuperación de terrenos de una zona ocupada desde el 19 de abril de 2004, denominada Sueño Real, situada en el sector parque oeste industrial de la capital Goiania, donde cuatro mil familias fueron brutalmente desalojadas por más de 2000 policías militares y que resultó en la muerte de 2 trabajadores, decenas de heridos y más de 800 ocupantes presos.
Esto sólo hace aumentar nuestra indignación y revuelta.
Esta acción únicamente atiende a los intereses del capital inmobiliario de aquella ciudad ligado con los intereses de la élite política local, que prefiere ver sus lotes vacíos en vez de hacer una verdadera reforma urbana. Estamos desde hace décadas esperando a que se dé esa reforma urbana en nuestras ciudades, con vivienda digna para todos, en este país que posee más de 7 millones de familias sin techo.
Hace meses que los movimientos de vivienda que actúan en el Estado venían denunciando la violencia y la truculencia de la policía contra los sin techo en Goiania, y en lo que terminó todo fue en violencia y muerte.
¿Hasta cuándo vamos a soportar esta situación? ¿Hasta cuándo vamos a continuar enterrando a los sin tierra y sin techo de nuestro país
Exigimos el pronto esclarecimiento de los hechos y responsabilizar a los culpables!
Y vivienda digna para los desalojados!
Carta de la Secretaria General de HIC al Ministro de las Ciudades
